El señor Forbes, sí, el mismísimo que quería ser Presidente de EEUU sin publicar sus informes de ingresos al IRS (Internal Revenue Service, que es como la Tesorería Yanqui) y a los servicios federales de impuestos. Por supuesto, si tomamos en cuenta su castillo en Francia, su Boeing 727, su isla en Fiji y las modestas cuentas bancarias en las mazmorras Suizas. Su capital asciende a la módica suma de 800 mil millones de dólares, aunque la revista Fortune es más "mesurada" y le achaca una fortuna familiar de 1,4 mil millones.
También es miembro de la “Comisión Especial para la Reconstrucción Económica de Cuba”, entidad que espera como ave de rapiña la caída de Fidel para resucitar a Batista y los burdeles donde se iba a recrear el clan multimillonario.
Cabe destacar que Malcom Forbes fue uno de los promotores de la guerra contra Irak, y como sabemos bien, esa guerra no tiene como objetivo la lucha contra el terrorismo, sino el anteponer los intereses económicos y futuros negocios de una minoría.
Él es quien "revela" el dineral que posee Fidel Castro (como lo ha hecho en sus anteriores ediciones) de la manera más burda y fantasiosa. Sus métodos para comprobar las fortunas ajenas son "más arte que ciencia" , según la propia revista. O sea, las matemáticas dejaron de ser las ciencias exactas para pasar a manías artísticas de un magnate. Finalmente la revista reconoce no tener evidencias sobre las supuestas cuentas bancarias del Comandante.
Además hay que considerar un pequeño detalle: la "fortuna" de Cuba (soportando un bloqueo económico) es propiedad del Estado, pero cabe preguntar ¿Quién es propietario de la fortuna de EEUU, Israel, Inglaterra...? Tienen nombres y apellidos.
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