sábado, 3 de marzo de 2007

(...)




mp3: Blonde Redhead "Hated Because Of Her Great Qualities"


Me callo

Y pasan los minutos y nos miramos con cara de cadáver, esperando que emerja un nuevo tema de conversación que nos resucite o nos vuelva zombis.

Puede ser una película.

Lanzo un par de frases sobre el film: "me gusta la B. S. O., la bajé la semana pasada" y "Prefiero a X en la película Equis"

Y aún así no es suficiente. Parece que estamos condenados a la abulia.

Acciones desesperadas por salvar la tarde o la noche ¿Qué le interesará? ¿Se enojará? ¿Qué mierda le digo? ¿Anécdotas?, ¿más filmes?, ¿música?, ¿libros?

Pero a mí me da igual, me encantan esos minutos muertos y espero por ellos.

Pero ¿qué me cuentas?

Pero ¿qué me cuentas?

Pero ¿qué me cuentas?

Pero ¿qué me cuentas?

Dime algo.

¿Qué te pasa?

¿Por qué estás callado?

En algunas ocasiones, muy pocas, me cuesta aguantar la risa cuando escucho estas frases, es que soy un pesado, me gusta ver esa cara de "por favor, que mi salida de casa valga la pena". Una desesperación que me es difícil atender.

Y aparezco otra vez con mi torpeza habitual al ser sincero y contar alguna de mis desventuras o lo más estúpido que se me pueda ocurrir, que es lo mismo.

A veces la timidez me impide salvar una conversación, también el desconocimiento de muchas materias, pero esto no es siempre una razón, pues también siento incomodidad al hablar de los temas que domino.

¿Para qué? siempre me ha dado vuelta en la cabeza lo extrañas que pueden ser las relaciones interpersonales, vaciar todo el contenido de la sesera para que el otro lo consuma. Una mercancía más.

Cada vez que hablo con alguien me doy cuenta lo triste que somos, esa abismal falta de comunicación. Las vueltas del lenguaje, intereses comunes, artificios para mantener la normalidad, lo que debe ser. La velocidad del pensamiento, dame una idea, dame otra, otra más, ¡eso! Catarsis verbal, nada más, para que al final de cuentas te preguntes ¿Con quién estuve hoy?




Conversar ha llegado a ser un ejercicio tan mecánico, sin sorpresas, aunque el emisor sea muy interesante y te revele la verdad que siempre quisiste escuchar.


Las palabras se hacen cada vez más inútiles, nunca me dicen lo que quiero saber. Entiendo que los matices que entrega el lenguaje literario pueden acercarnos al interior de una persona o acontecimiento, pero estar con alguien no es como leer, todo transcurre a gran velocidad, la vida se escapa, y el significado de las pocas palabras que entregamos son tan acotadas que terminan siendo una molestia.


He notado que esa página en blanco, que es el silencio incómodo, tiene más vida que una conversación. Es ahí donde la persona aparece y deja toda parafernalia, los segundos muertos son un colador de datos poco útiles, experiencias que bien se podría haber leído o escuchado en otro lugar. En silencio miras a quien ahora es tu compañer@, ves sus gestos y realmente se empieza a disfrutar, ¡por fin está contigo! Es por eso que lo encuentran molesto, el estar desnudo frente a otro. Curiosamente la etimología de la palabra “persona” se refiere a la máscara utilizada por un “personaje” teatral. Ver tras esa máscara da mucho trabajo, es un verdadero arte.

Como los personajes de las películas de Jim Jarmusch donde pasa el vacío frente a ellos, dejando al descubierto sus miserias y virtudes, los tipos se miran una y otra vez, se pasean por lugares comunes sin resultado alguno, hablan de A, B ó C y vuelven al punto de partida, en el silencio total.


Me gusta cuando callamos porque estamos más presentes que nunca.

5 comentarios:

La muy Matrera dijo...

Siempre he pensado lo mismo... ea especie de sensación de vacío que se da entre las conversaciones con quienes llevas una especie de juego verborreico...
En fin, parece que pienso en demasiadas cosas y eso me estresa.
Saludos.

cogollo el feros dijo...

es la pulenta berdá ermanito
el cilensio el cilensio es lo mas ermoso de toa la guea
ha bece igual es gueno soltar la sin hueso y aular aular y aular

digo llo, por ser

cogollo el feros

cogollo el feros dijo...

es la pulenta berdá ermanito
el cilensio el cilensio es lo mas ermoso de toa la guea
ha bece igual es gueno soltar la sin hueso y aular aular y aular

digo llo, por ser

cogollo el feros

Mediocre!!! dijo...

Rato que no pasaba por acá, El Silencio dentro del ámbito legal no constituye una manifestación de voluntad, salvo ciertas excepciones... pero eso a nadie le importa...
Yo creo que la comunicación es importante tanto dentro como fuera de la sociedad y el silencio,aunque suene raro, forma parte de nuestra particular forma de comunicarnos,por lo demás a mi también me gusta el silencio, tal vez no tanto como a tí porque a veces suele incomodarme... aunque todo depende de la situación...



Saludos

¡Come tus cereales! dijo...

Sangre Ácida: mmmh, yo también pienso demasiado, debería cotarme la cabeza.

Cogollo: Por supuesto que es bueno soltar la sin hueso...

Eduardo: todo depende. No entendí eso del ámbito legal...bueh, ya no entiendo nada.

Sr(a)s Anónimos: ¡¡¡Me cambio a la UDI, porque saben que estoy necesitado!!! dónde firmo?